- ¿Qué requisitos se han de cumplir para llegar a la presidencia?

 

Requisitos legales, ser socio del club. No hace falta ninguna cosa más dentro de los estatutos del Leioa para ser candidato a presidente. Para ser presidente, además, tienes que ser elegido. 

 

 

- ¿Cuál es la labor del presidente en este club?

 

Dirigir el club. Dirigir el club significa rodearte de una buena junta directiva y, de algún modo, saber coordinar y dirigir las diferentes tareas y actividades dentro del club.

 

Esas tareas y actividades están dentro de un plan estratégico de cara a intentar cumplir los objetivos que se definan y a partir de ahí la organización de las tareas y la atribución de responsabilidades a cada una de las personas. Hay diferentes responsables por áreas y la labor del presidente es la de estar por encima de todas ellas.

 

Los responsables de cada área son personas de confianza del presidente y a partir de ahí pues intentar coordinar para que el barco vaya en una única dirección.

 

Luego hay otras tareas propias de la presidencia como son las de representar al club en todas las actividades en las que participa el club, la mayoría, obviamente, partidos de la liga, pero también la de representarle de manera adecuada en órganos federativos y en todos aquellos lugares en los que haya que defender los intereses del club.

 

 

- ¿Es una labor que ha variado a lo largo de los años?

 

Pues digamos que la labor es siempre la misma. Otra cosa es que el club según va creciendo va teniendo nuevas responsabilidades, va entrando en supraestructuras, va teniendo más necesidades de relación, de obligación de responsabilidades, etc.

 

Ello hace que vaya creciendo también la actividad de la presidencia y también de la junta directiva y finalmente de toda la estructura del club.

 

Cuando estás en una categoría regional la labor es, sobre todo, de organización interna, de que funcione la estructura del club bien y luego de cara al exterior tampoco hay tanta necesidad de trabajar el nivel de relaciones como puede ser en una Segunda B. Ya no te digo en una Primera o en una Segunda División.

 

 

- Llevas muchos años en el club. ¿Cómo ha evolucionado el Leioa?

 

Tú no te das cuenta. Si te miras al espejo todos los días no te encuentras nada diferente con el día anterior. Antes he visto una foto de cuando yo tenía 6 años y algo he cambiado. Y no a mejor (ríe).

 

Pues esto es lo mismo. Tú no te vas dando cuenta, pero probablemente, sobre todo a nivel del primer equipo, a nivel de la estructura de lo que obliga la Segunda B, pues sí que es verdad que cuando cogimos esta responsabilidad en junio de 2014, estábamos en Segunda B, pero no habíamos estado nunca en Segunda B. Todavía no conocíamos las necesidades, responsabilidades y las vivencias que te lleva el participar en una categoría como esta.

 

¿En qué ha podido evolucionar? Dentro de la estructura del club anda parecido. Hay otras responsabilidades diferentes debido a las obligaciones de la categoría y después de 38 partidos de Segunda B y de tres partidos de Copa del Rey, que tampoco habíamos disputado, pues probablemente haya habido una evolución que, con ese día a día que hemos vivido, todavía no soy capaz de darme cuenta de que la ha habido.

 

Pero seguro que sí. Y a nivel de organización interna del club, a nivel de funcionamiento del primer equipo, a nivel de logística, pues al final hemos tenido que hacer muchas cosas que antes no teníamos que hacer. Solamente el tema de los viajes, de las noches fuera de casa, de una plantilla que evidentemente es amateur pero con mentalidad profesional, por la forma en la que ahora estamos fichando jugadores… hay una serie de cosas en las que seguro que ha habido un cambio importante, pero que no aprecio a entender del todo.

 

 

- ¿El objetivo es el mismo ahora que en 2002? Quizá el objetivo ahora sea mantener el primer equipo en Segunda B y hace 13 años era formar jugadores y hacer una labor social con el deporte y la cantera.

 

Nosotros en 2002 hicimos un plan estratégico. Marcamos nuestra visión, nuestra misión, nuestros objetivos estratégicos y las actividades para realizarlos. Y nosotros nos marcamos ser el club referente en la margen derecha. Así. Y había todo por hacer. Había por hacer una escuela, había por hacer un trabajo en el fútbol base y en el primer equipo.

 

Acabábamos de subir a División de Honor Territorial, que se acababa de conformar. Logramos entrar en ese grupo y acabábamos de dar el primer paso. Y entonces había un objetivo muy importante: consolidar al primer equipo y esa labor de crear una escuela, una labor social y a la vez deportiva, todo se mezcla.

 

Y con esa perspectiva, en 12 años José Ángel Basauri y su equipo hicieron muchísimas cosas: lograron crear una escuela de fútbol impresionante, lograron hacer que el primer equipo estuviese en Segunda B, lograron que la escuela femenina se consolidase y que el primer equipo llegase a Liga Vasca.

 

Los objetivos siguen siendo los mismos, a otra escala, pero siguen siendo los mismos: consolidar el primer equipo, consolidar el primer equipo femenino que la próxima temporada va a jugar en Segunda Nacional por ser subcampeonas y hemos tenido derecho a acceder a una plaza vacante que había quedado en la categoría, y tenemos un reto muy importante que es el de mantener y evolucionar la escuela.

 

Después de bastante tiempo estamos analizando las debilidades que tenemos dentro de la escuela y el fútbol base. Son debilidades que nos están repercutiendo negativamente y tenemos que solventarlas y estamos trabajando en un plan para, esa escuela que tan buena es -que en total hace que tengamos alrededor de 50 equipos en el club-, se consolide, se fortalezca y cumpla el objetivo social de hacer que cientos de niños del pueblo y alrededores puedan practicar el fútbol. Y luego la componente deportiva de conseguir que tengamos un futbol base de nivel y que pueda servir para que no se rompa la cadena y pueda surtir de jugadores al primer equipo.

 

 

- ¿El Leioa tiene margen de evolución?

 

Sí, claro. El Leioa siempre tiene margen de evolución. Es mucho más fácil evolucionar cuanto más abajo estas. Ahora cada vez el umbral de evolución es más duro y está más complicado, pero seguimos evolucionando.

 

El Leioa del año pasado (se refiere a 2014) a este año ha evolucionado. De no haber jugado nunca en Segunda B a jugar en Segunda B 41 partidos –cuenta también los tres de Copa-. Y de ascender de Tercera a Segunda B a lograr la permanencia, es una evolución magnífica. Humildemente, lo que hemos hecho este año es más difícil que lo que hicimos el año anterior. Vamos evolucionando.

 

Tenemos que seguir creciendo. Humildad, pero ambición. Entonces, nunca sabes lo que va a pasar. Y menos en la Segunda B y menos si tenemos un grupo tan complicado como tuvimos el año pasado, en el que hasta la jornada ‘veintitantos’ en dos partidos podías estar en play-off o en dos partidos podías estar en descenso. Así de claro. Y nosotros vivimos ambas cosas.

 

Nosotros con esa humildad, pero con esa ambición decimos que queremos mejorar. No decimos, obviamente, que vamos a ser equipo de play-off, ni que vamos a entrar en la Copa, pero no será porque internamente no lo pensemos. Así de claro. Y sabiendo que lo más lógico sería que vivamos como el 90% de la categoría, con la necesidad de los puntos hasta el final.

 

En el apartado femenino lo mismo. No queremos desaprovechar la oportunidad que tenemos de debutar en Segunda Nacional. Sabemos que va a ser muy complicado, pero como siempre, vamos a querer seguir creciendo y el objetivo es mantenernos.

 

Y no te digo que en unos años el primer equipo masculino no pueda estar pensando en otras cosas. La vida es muy complicada. Esto que te estoy diciendo ahora se te puede desmontar cuando al final de la temporada la clasificación diga otra cosa. Pero no será porque no pensamos en grande. Porque queremos evolucionar.

 

 

- ¿Merece la pena el cargo?

 

(Ríe) Si hablamos con mi familia igual dice que no. Pero también hay que reconocer que yo con 14-15 años ya estaba así, en líos por todas partes.

 

Con 18 años ya era directivo de un club de atletismo. Directivo a un nivel alto. Con 30 era presidente de la Federación Vasca de Atletismo. Mi vida ha pasado siempre por temas de deporte, aparte de mi formación profesional y de mi vida profesional que no tiene que ver nada con el deporte, siempre he estado en estas historias.

 

Entonces para mí es algo bastante habitual. Y no voy a ocultar que me gusta. Las cosas también claritas.

 

Entonces si merece la pena, ¡a mí y sólo a mí!, personalmente, me merece la pena. Hay muchos disgustos. Pero como la vida misma, que nos da muchas alegrías, muchos disgustos y hay que saber equilibrarlo.

 

A mí, personalmente, a pesar de todos los líos, de todos los conflictos, de todas las historias, a mí, pues me gusta. No sé si es una versión moderna del masoquismo, pero por lo menos es un masoquismo bastante light.